martes, 21 de abril de 2015

Lecto-escritura en el aula Waldorf

¡Buenas tardes!

  Hoy os traigo una aproximación a la metodología Waldorf en cuanto al inicio de la utilización de grafismos y el paso hacia la letra entendida como tal. Para ello explicaré una serie de actividades que realizadas en orden darán al niño las habilidades necesarias para escribir de manera adecuada, con una postura corporal correcta y sin tensión. ¡Comencemos!

Actividad 1: Juegos de dedos

  Los juegos de dedos desarrollan la motricidad fina, la precisión y la lateralidad. Un ejemplo de juego de dedos podría ser el siguiente:

 "Llueve en la montaña,

llueve en el portón

niña no te mojes

con el chaparrón.

  Ponte el paragüitas,

ponte el paragüón.

  Niña no te mojes

con el chaparrón."

               El chaparrón, Tamara Chubarovsky.

Actividad 2: Juegos en pareja

  La finalidad de este tipo de juegos es integrar las habilidades que los niños necesitarán posteriormente para leer y escribir. Es importante que el niño antes de comenzar con la etapa lecto-escritora sea capaz de controlar su cuerpo y su fuerza, entre otras cosas. Por ello, este tipo de juegos son tan prácticos puesto que se adquieren esas habilidades mediante el tacto con el compañero, lo que proporciona al niño al mismo tiempo calidez y gusto en la tarea.

  "Valiente caballero,

un nuevo traje van a hacer,

del color que él elija,

del color de su parecer.

*el niño elije el color*

  Ceñido, ceñido y bien cosido.

Ceñido, ceñido y bien cosido. (x2)

  Unas botas de cuero. (x2)

  Una capa cosida con esmero.

  Y una corona en la cabeza,

señal de su nobleza."

                  El traje. Tamara Chubarovsky

Actividad 3: Como príncipes y princesas

  Esta actividad se utiliza como medio para reforzar la buena postura del cuerpo y se realiza de la siguiente manera: 
  1. Creamos un círculo con todos los niños.
  2. Repartimos saquitos de arroz y los niños los colocan  en su cabeza.
  3. Comenzamos a andar en círculos cantando canciones, recitando poesías...
  Como hemos mencionado anteriormente, es de gran importancia una buena posición del cuerpo para conseguir que la experiencia escritora no sea traumática para el niño y así evitar posibles futuros problemas posteriores ya sean de corte psicológico, de salud...

Actividad 4: Trazos

  A continuación se va a explicar la progresión en el trazo según la metodología Waldorf


  • Trazo vertical: en primer lugar, ayuda al niño a situarse en otro espacio. Además, refuerza la idea de posición recta y erguida. 



  • Trazo circular: da al niño un sentido hacia los elementos curvos de las letras.



  • Trazo recto y circular: cuando acercamos lineas rectas y curvas ofrecemos al niño la posibilidad de desarrollar el concepto de simetría. Así mismo, seguimos desarrollando la lateralidad.



  • Lineas horizontales: las lineas fluidas horizontales presentan al niño el concepto de movimiento a lo largo de una linea.



  • Bases de la letra: mediante el acercamiento de lineas rectas y curvas, creamos las bases de las letras. En este proceso no se debe caer en el nombramiento de la letra por su nombre; de esta manera, los niños trabajarán de la misma manera relajada. Pero en este paso se da la posibilidad al maestro de ver si algún alumno tiene una dificultad en la inversión de las letras o en el distinguir de los movimientos.



  • Letras: una vez los niños hayan trabajado estas bases y hayan desarrollado completamente los músculos y el sentido de habilidad, se podrán presentar a los niños las letras tal cual son realmente, con sus usos y sonidos.



  Es importante tener en cuenta que en estos pasos no se ha especificado ninguna edad puesto que, como sabemos, la metodología Waldorf es respetuosa con el niño y por ello cada uno irá desarrollándose a su propio ritmo de aprendizaje. 
  

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